Esta provincia de Cataluña alberga insuperables bellezas, cada una con un nombre distintivo que engalana la lista de algunos de los pueblos con encanto en Girona. Localidades medievales detenidas en el tiempo dignas de ser visitadas, que se conservan intactas con una magistral combinación entre naturaleza, patrimonio cultural e historia.
Así que si estás pensando en disfrutar de unos días en Cataluña, vale la pena que no te pierdas este post en donde mencionaremos los pueblos más bonitos de Girona que no puedes dejar de conocer.
Pueblos con encanto en Girona
Cada localidad medieval de esta lista tiene un encanto sin igual, pero más allá de eso, cada una atesora algo especial que la caracteriza y está esperando a ser descubierto por ti. Una vez que conozcas estos pueblos con encanto en Girona seguro que cada uno de ellos te enamorará.
1. Besalú, ¿el pueblo más bonito de Girona?
Besalú data del siglo X, una preciosa villa medieval que se ha mantenido intacto para ser apreciado por sus visitantes. Con solo entrar podrás disfrutar de un puente medieval del siglo XI y descubrir increíbles rincones, como la judería y la muralla del Portalet.
El arte y la historia se ven reflejados claramente en el Monasterio de Sant Pere, la Casa de Cornellà, la sala gótica de la Curia Real, el puente románico, la casa de Cornellà, la iglesia de Sant Vicenç y la fachada de la antigua iglesia hospital de Sant Julià, originaria del siglo XII. Si te aventuras a descubrirlo sabrás por que es considerado el número uno de nuestra lista de pueblos con encanto en Girona.
2. Camprodón
Encantador pueblo ubicado en el corazón de los Pirineos orientales, con un impresionante patrimonio histórico y cultura, donde se unen los ríos Ritort y Ter. Deslúmbrate al conocer el Puente Romano que data del siglo XII, una localidad que da paso a la comarca vecina de la Cerdanya.
Continúa descubriendo maravillas al recorrer el monasterio de Sant Pere de los siglos X y XII, y el museo dedicado a Isaac Albéniz.
3. Beget
Es uno de los pueblos más bonitos y pequeños de Girona, idóneo para pasar unos días desconectados del mundo, ya que mantiene intacta su estructura desde el siglo XII. Muchas de sus casas conservan su estilo del siglo XIX, a pesar de que fueron restauradas.
Dentro de sus encantos para conocer están sus espectaculares calles, que dirigen hacia monumentos destacados como sus dos puentes medievales del siglo XIV y la Iglesia de San Cristóbal construida entre los siglos XII y XIII. Denominadores como la tranquilidad y calma son distintivos de esta localidad del Valle de Camprodón.
4. Castellfollit de la Roca, uno de los pueblos con encanto en Girona
Esta preciosa localidad parece estar literalmente colgando de una roca a más de 50 metros de altura. Tiene casas de estilo romántico y un increíble entorno natural que puede ser divisados desde el Mirador de Josep Pla. También, puedes pasear por sus estrechas callejuelas, su casco histórico y visitar lugares como la plaza de Catalunya y la Iglesia de San Salvador que tiene un estilo renacentista.
Lo más interesante es que desde este pueblo puede accederse al Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrotxa. ¿Te imaginas disfrutar de una excursión con tus pequeños por este parque natural? Te garantizamos que es una actividad súper recomendada.
5. Monells
Este increíble medieval empezó a ser conocido hace unos pocos años, gracias a que en ese lugar se rodó la película “Ocho Apellidos Catalanes”. En Monells se respira el aire medieval desde cualquier rincón, a través de sus antiguas murallas, los pasajes y plazas porticadas.
Muy cerca de la entrada se encuentra la plaza de Jaime I, que muchos consideran el corazón del pueblo. No puedes dejar de visitar su encanto principal, la Plaza Mayor del siglo XIII y la Iglesia de San Ginés de estilo gótico.
6. Cadaqués
Es un bonito pueblo costero que se mantiene auténtico, con su casco antiguo, calles empedradas y casas blancas de estilo antiguo que combinan a la perfección con su entorno natural conformado por preciosas calas y el Cap de Creus.
También destaca la Iglesia parroquial estilo gótico tardío de Santa María del siglo XVI, aparte de diferentes monumentos que aluden a Salvador Dalí que posee su Casa Museo. En este pueblo encantador las horas se irán volando, ya que hay mucho que ver y conocer: tiendas, restaurantes y hasta talleres de artesanía.
7. Peratallada
O piedra tallada, debe su nombre a que el pueblo fue levantado sobre una antigua cantera de época romana. Realmente inspira, mientras recorres sus callejuelas de arenisca y muros cubiertos por enredaderas y plantas trepadoras con coloridas flores.
Peratallada no podía faltar en esta lista de pueblos con encanto en Girona, ya que es considerado el pueblo más bonito y auténtico no solo de Costa Brava, sino de Cataluña. En él destacan sus laberínticas calles de piedra, un castillo de cuento original del siglo XI, la plaza de las Voltes, la Torre del Homenaje, el Portal de la Virgen y la Iglesia de San Esteban del siglo XIII.
8. Peralada
Es un jardín lleno de flores, un castillo del siglo XIV poseedor de dos torres y una almena muy notable provisto de árboles centenarios que lo rodean y un museo que no puedes dejar de visitar, ya que expone una de las colecciones catalanas de arte más importantes, la colección Suqué Mateu.
Al continuar tu recorrido por su casco antiguo, podrás asistir al claustro de Sant Domènec. Peralada también es muy famoso por sus festivales de música internacional de la Costa Brava. Es sin duda alguna uno de los pueblos con encanto en Girona que te enamorará.
9. Begur, uno de los pueblos con más encanto de la Costa Brava
Situada en el corazón de Empordà, es uno de los destinos más atractivos de Costa Brava por sus espectaculares playas y conjunto de colinas que llamadas Macizo de Begur. Destaca su castillo desde donde podrás tener una vista sobre la costa y las torres de defensa que datan de los siglos XVI y XVII, así como las casas de estilo colonial e indiano.
Disfruta de caminar por su casco antiguo y sus tranquilas calles y descubre porque es uno de los pueblos con encanto en Girona que más turistas atrae durante la temporada estival. No te olvides de hacer el Camí de Ronda, que recorre la costa de St. Feliu de Guíxols a Begur.
Este apacible pueblo posee múltiples monumentos históricos y naturales muy significativos, como el Esclanyà, las ocho calas y playas que le otorgan un entorno paisajístico inigualable.
10. Pals
Un espectacular pueblo que emerge tras las montañas de Begur rodeado del entorno inmejorable de la costa. Sus murallas construidas entre los siglos XII y XIV albergan una gran variedad de monumentos, liderados por la Torre de las horas, construido entre los siglos XI y XII, que fue destruido durante la Guerra Civil y fue convertido en un campanario de estilo gótico.
Te aguardan más de 1.000 años de historia en La casa fortificada de Ca La Pruna y la Iglesia de San Pere, edificaciones que combinan el arte románico, gótico y barroco.
11. Santa Pau
El arte gótico y renacentista se mezclan en esta pequeña villa medieval del siglo XIV, que se encuentra en pleno Parque Natural de la Zona Volcánica de La Garrotxa y a la vez muy cerca de la Fageda d’en Jordà.
Ofrece su castillo fortaleza construido entre el siglo XIII y XIV, la Iglesia románica de San Vicente y el Monasterio de Sant Juliá del Mont. Aparte de la sobria, preciosa e imponente Iglesia de Santa María y su impresionante campanario.
Otro atractivo es el portal del Mar, un mirador que ofrece una vista espectacular del valle del Ser que rodea Santa Pau.
12. Calella de Palafrugell
Este es otro de los encantadores poblados de Costa Brava, que pueden proveerte una experiencia única. Honroso pueblo de pescadores con pulcras casas blancas y espectaculares calas. Inspiración de la canción “Mediterráneo” compuesta por Joan Manuel Serrat.
Admira el precioso Jardín Botánico de Cap Roig y tampoco te pierdas la oportunidad de hacer el Camino de Ronda, una increíble ruta de senderismo. Calella de Palafrugell, merecidamente, fue declarado bien cultural de interés nacional.
13. Madremanya, otro de los pueblos con encanto en Girona
Muy cercano a Monells y ubicado en la cima de una meseta a 117 metros de altitud. Este encantador pueblo rural es poseedor de arcos y estrechas calles medievales, por las que se puede disfrutar de un tranquilo paseo, de gran belleza que vale la pena descubrir, a pesar de no ser tan conocido y turístico.
Al entrar destaca la silueta de la iglesia parroquial de Sant Esteve y a su alrededor se divisan peculiares fachadas de casas. Muy cerca de Madremanya se encuentra el núcleo de Millars en el que destaca su castillo y, la iglesia parroquial de Sant Iscle y Santa Victoria.
14. Tossa de Mar
Conocida también como Vila Vella, está situada entre preciosas calas y playas, resguardada por las murallas del castillo de Tossa, y llena de calles de canto rodado y fachadas de piedra que proporcionan un ambiente inolvidable. Esta preciosa villa medieval del siglo XI, es ideal para pasear y disfrutar de un verdadero oasis de paz de aguas cristalinas, con un increíble fondo marino ofrecido a los amantes del submarinismo.
Cuenta con monumentos de gran belleza como la Iglesia Parroquial de San Vicente originaria del siglo XVIII.
15. Castelló d’Empúries
Es apodada la “Venecia catalana”, con sus calles estrechas y murallas. En ella puedes descubrir la magnífica basílica de Santa María de Castellò d?Empuries de estilo gótico, poseedora de grandes tesoros como la Virgen de la Candelaria del siglo XV, las pilas bautismales del siglo XIV y el órgano del siglo XIX.
Otros lugares para conocer son los museos de Historia Medieval de la Curia-Prisión del siglo XIV y el Ecomuseo-Farinera.
Aparte, cada año, específicamente la segunda semana de septiembre, celebran el Festival Medieval Tierra de Trovadores y cada segundo fin de semana de octubre la Ruta de la ART.
16. Sant Martí d’Empúries
Fue la primera población medieval de Costa Brava, que acogió a sus primeros habitantes a partir del siglo IX a.C. Un destino turístico excepcional con mucha historia y preciosas calas. Impresiona la existencia de los restos de su antiguo castillo, así como de la Iglesia Parroquial de Sant Martí del siglo XVI.
No pierdas la oportunidad de recorrer sus calles estrechas para llegar a la plaza Mayor y al paseo de Empúries, que sirve como medio para unir a Sant Martí con el casco urbano de L’Escala. Muy cerca se encuentran las playas de Empúries y el antiguo Moll Grec.
Lo más impresionante, es que muy cerca de él se encuentra el yacimiento arqueológico de Empúries.
17. Tavertet
Este pintoresco pueblo situado en lo alto de un peñasco junto a un precipicio, es poseedor de preciosas casas de piedra, casonas y masías originarias del siglo XVII, con una impresionante vista y acantilados de la sierra de Collsacabra, que escoltan al pantano de Sau y las Montañas del Montseny.
Aparte, está rodeado de un frondoso bosque mediterráneo, que lo hace el lugar perfecto para disfrutar de la naturaleza y realizar excursiones en familia. Puedes visitar la iglesia construida entre el siglo XI y XVII, la iglesia de Sant Miquel de Sorerols del siglo XI y los restos del castillo de Sorerols.
18. Rupit
Su nombre completo es Rupit i Pruit, poseedor de un sorprendente casco histórico y un entorno serrano que envuelve una estructura tradicional. Rodeada de montañas y un río que riega la parte baja.
Dedícate a contemplar sus casas de piedra y su Plaza Mayor. Lo más impactante de la población es su iglesia románica del siglo XI y su puente colgante. Otro de sus atractivos es la cascada del Salt de Sallent y el mirador dels Bassis que ofrece una vista increíble. Como has podido ver pueblos con encanto en Girona hay a montones.
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